jueves, 22 de octubre de 2009

Once

Érase una vez...
La historia de siempre.

Chico y chica se conocen y surge... la música.
Él es irlandés. Ella una inmigrante checa.
¿Y qué más se puede decir de esta película? No hay mucho más. Es una demostración de que las cosas pequeñas pueden ser muy interesantes si se presentan desde la perspectiva adecuada.
Debe verla todo el que guste de la música.
Y todo el que sepa apreciar las historias mínimas.
Personalmente me encantó la escena en que ella camina por la calle con la aspiradora, de un lado para otro, como si paseara un perro.
¡Ah! Y si hablo de "él" y de "ella" es porque eso son. No hay nombres propios. Cosa que da que pensar.
Puedes verlo el 26 de octubre en el salón de actos (o sala de estar) del Colegio Mayor Peñafiel. No sé que echan en ese momento en la Seminci, pero dudo que sea mejor.

1 comentario:

guitarra loco dijo...

Muy buena música... espero ser algún día un artista callejero